lunes, 2 de julio de 2012

He aquí un caballo pálido.


A veces mientras miro el espejo me causa tanta gracia ver mi propio rostro, admirando todas aquellas películas de amor, todas esas fantasías que creo que algún día quizá podrían ser parte de mi obra maestra, quizá paso demasiado tiempo pensando esas cosas, pero tal vez sea porque es lo que en verdad deseo en estos momentos, algo real, me canse de divertirme, es posible eso?... Llevo mucho tiempo esperando respuestas, me da tristeza aún seguir sin obtenerlas.

Me gustaría tener un jardín con grandes árboles, con raíces que cuenten más de mil ocho mil cuentos, que su tronco pueda ser mi descanso y me pueda abrazar con más calor que un cuerpo vacío, ya me cansé de empezar siempre desde cero, sé que siempre tiene que ser así, pero por una vez me gustaría no tener que hacer todo el trabajo.

He pensado lo peor, he pensado que quizá no fue él el que desapareció, si no que yo me volví el aire invisible que usa todos los días; tenía tantas ideas y ahora me siento como otoño.

Yo sé cómo reírme de mí misma, me agrada hacerlo, por eso soy tan diferente a las demás, puede ser egoísta sentirme especial, pero es que por mucho tiempo me sentí como un objeto, como un simple instrumento para llegar a esa desesperante felicidad temporal.

Simplemente me estoy deteniendo, hay muchas cosas que quiero contar, pero no puedo, porque sé que el mundo me va a juzgar, a veces es mejor tener secretos, así evito que las personas hagan testamentos de mi historia, con muchas faltas de ortografía y esas cosas que no van conmigo.

No me arrepiento de nada de lo que ha pasado, no me arrepiento de las decisiones que he tomado, me alegra, estoy dispuesta a tomar más riesgos, porque confío, confío en él, ha sido una de las pocas personas con las que he podido ser yo, que no me ha juzgado, estoy dispuesta, aunque no implique sentimientos…

Y de otros temas…

… me quedo corta, yo no soy una persona que busque, yo no soy normal, tiendo a aburrirme, quizá no me conoces ni un .01%, creo que es mejor que regreses por donde viniste, no soy alguien a quien puedas tratar así, asómbrate del porqué  he estado tanto tiempo sola, es simplemente que estoy expuesta a constantes cambios, no siempre se logran adaptar, ya me resigné a que nadie podrá conmigo, pero también estoy aprendiendo a vivir conmigo misma en estas paredes que me retienen. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario