sábado, 5 de mayo de 2012

La verdad... no sé usar tacones.


Sus expectativas, se encuentran parpadeando o con unos puntos suspensivos, hubo un problema terminando esta historia.

La calma pareciera no llegar, una mañana tan tranquila como las usuales, sale por unos oficios de su rutina semanal sin contar los fines de semana, mientras viajaba con su compañero, el sonido del exterior no la distraía ya que el aire acondicionado era necesario en esos momentos, le dio mucho tiempo para pensar la situación, su deducción?... qué risa, qué ironía, lo que descubrió se volvería más grande que ella. 

El diagnóstico más aterrador de su mediana vida, un sentimiento emocional fuera de lo normal hacia su padre, que se le hacía una figura de admirar, que historia más rara, con tanto tiempo que pasaba con él ella creía que era normal aquel sentimiento de cariño constante, fuera de lo normal? Para nada, pero sí, más que lo que debiera ser, había optado por tomar como figuras paternas figuras públicas y externas, tan ajenas a ella.

Perdón, esta historia se salió de su curso, no es lo que estaba pensando, sólo quería dar un poco de trama, pero sólo fue un habloteo sin sentido.

En realidad quería hablar de una chica, una real, esta sólo tiene un sentimiento de rencor hacia su padre, pero eso no era lo importante, quería contarles lo viva que se siente cada que recuerda su esencia de aquél joven (cabe la constante aclaración que hablo del chico del que se enamoró), no es que se tome su tiempo para pensar en él, sus horarios fueron acortados, o en sí, ocupados en otras cosas, su vida ha cambiado, no sabrá si para bien, pero está consciente del aspecto negativo, orgullosa, si vieran lo que ha hecho con sus alrededores, es que en que él se marchó buscó dónde liberar esa carga, ahora, sustancial su bello estado de ánimo, no necesita más distracciones, pero últimamente ha recurrido a sus pensamientos, hace tiempo que no lo hacía, pero es que lo ha estado viendo por doquier, eso es algo raro, no usual, pero nosotras qué sabemos?

(Aquí hay un espacio que no supe cómo llenar).

[Hola cariño, quiero decirte que es cierto que te he extrañado, pero quiero decirte que descubrí que ninguna persona nos es esencial, sólo complementaria, gracias por complementar mi felicidad, te deseo lo mejor, que quizá mañana por fin te deje marchar]

Perdón, sólo soy una personalidad más hablando de la vida de una extraña.

Querida YO, te has visto hermosa estos últimos días en que has sonreído, espero continúes así.

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