Hazlo porque te quiero.
No importa, bueno, en realidad sí, pero son muchas cosas las
implicadas, el respeto de decisiones ajenas no siempre se da en una persona
madura…
Me encantan aquellos lugares, aquellos que son escenarios de
obras majestuosas, como aquella vitrina del café de cierto hotel cuyo nombre no
recuerdo, mi padre, en una escena curiosa, a la espera de nuestra partida, no,
esto realmente no importa, o aquél estacionamiento que se volvió nuestra cama,
amante, que delicia, si esos tiempos pudieran volver, pero no, para eso está el
pasado, para hacernos sonreír de nuestra situación actual.
Qué tan difícil puede ser hacer ciertas cosas? Decirle que
me gusta o decirle que lo quiero, pero que sea real, que sea visible, que sea
emocional…
[Cómo dejar de ser una persona fría sin demostrar
vulnerabilidad, sin demostrar temor? Quiero amar, pero me vuelvo transparente,
no sueno bien, mi verdad es tan equivalente y tan síntomas de fallecimiento…]
A veces me cuesta trabajo recordar las cosas, por eso
prefiero redactarlas en textos que se guardan en memorias, prefiero que nadie
sepa mis más íntimos deseos, pero también estoy a la espera de alguien que al
leerlos sienta que está leyendo su mente… que sea yo… que sea como aprendí en
física… mi antipartícula.
Si te digo lo que siento, si te digo cómo me siento, si te
digo lo que sentí por ti… qué cambiaría? Qué fantasmas de tu pasado vendrán a
perturbarme dándome esa sensación de placer que tanto he anhelado…
Adivina qué?... Es tonto decirlo, no? Nunca podrías
adivinar, porque no sabes nada de mí, en realidad nadie lo sabe, este agujero negro
ha consumido lo que queda de mis ganas por seguir.
No quiero anticiparme a decir que me gusta, pero … me gustan
los extraños.
No hay comentarios:
Publicar un comentario